La sostenibilidad llegó para quedarse y para mostrar que los beneficios saltan a la vista.
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| El edificio de Novartis ahorra 37 por ciento de la energía que gastaría uno tradicional y 57 por ciento del agua; además, tiene una cubierta verde de 450 metros cuadrados. Foto: Archivo Portafolio.co |
El bienestar de los usuarios y el ahorro son los dos componentes de la sostenibilidad, una estrategia que, más que una tendencia, se convierte en una exigencia en temas de responsabilidad con el medio ambiente.
Una fórmula que garantiza que las generaciones futuras también podrán disfrutar de los recursos naturales.
El primer paso es un ‘lavado de cerebro’. Así lo ratifica Harry Child, presidente de Prodiseño. “Esa es la labor que tienen que hacer diseñadores y arquitectos pensando en que hay que respetar el medio ambiente”.
El experto agrega que “desde la misma concepción del diseño, hay que ubicarse en el entorno; luego, es importante pensar cómo se va a preparar el terreno y, también es necesario analizar las características de los insumos que se van a utilizar”.
El paso siguiente “es conformar un grupo interdisciplinario que involucre a todos los actores relacionados con la edificación. Tienen que sentarse en la misma mesa”, explica Cristina Gamboa, directora ejecutiva del Consejo Colombiano de Construcción Sostenible.
Iniciativas en acción
No son lejanos los ejemplos que muestran las grandes diferencias que un diseño sostenible puede representar. Una de las iniciativas es el edificio de Novartis, en Bogotá.
La multinacional, dedicada a la industria farmacéutica, se propuso la construcción de una estructura amigable con el medio ambiente, tiene 9.669 metros cuadrados, ahorra 53 por ciento de agua y 37 por ciento de energía; adicionalmente, las aguas lluvias son recicladas para suministrar líquido para el funcionamiento de los sanitarios.
De esa manera, “hacer edificios sostenibles es mucho más viable de lo que uno cree”, puntualiza Martha Gallo, directora general de Arquitectura e Interiores, empresa dedicada al diseño y construcción de espacios corporativos. Durante su ponencia en el panel ‘Diseño interior sostenible’, de Expoconstrucción y Expodiseño 2011, esta experta explicó que “uno de los escenarios que genera más contaminación, en el mundo, si no es bien llevada, es la construcción. Por eso hay que actuar ya, pensando de forma sostenible”.
Más alternativas responsables con el medio ambiente
Un ejemplo adicional es la estructura para edificios corporativos, que diseñó Arquitectura e Interiores para el funcionamiento de sus oficinas.
Tiene un 40 por ciento más de eficiencia en el uso del agua que una tradicional; además, el 90 por ciento de los espacios cuentan con luz natural suficiente para laborar durante el día.
Esta obra genera un 25 por ciento de ahorro en consumo de energía, los materiales usados son ecológicos y existen censores que saben cuándo los espacios requieren luz artificial; y otros que detectan exceso de CO2 en las salas de juntas y ponen a funcionar el aire acondicionado para lograr mayor calidad del aire que se respira.
Fuente:( PORTAFOLIO.CO )
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